EL RAMO
Y de la planta broto un botón,
Frágil,
perfecto y con ilusiones,
Un
botoncito que se fue formando,
Que se
lleno por dentro de pétalos y polen,
Que
apuraba su madurez, sus pistilos,
Que
deseaba abrirse al mundo
Y
mostrarle a todos lo precioso de su ser,
Parpadeo y
abrió su único ojo hermoso,
Desenvolvió
sus pétalos y los estiró,
Se mostró al sol y al viento
Se mostró al sol y al viento
Como cosa
única y todo poderosa,
Arrogante
se volvió hacia todo,
Y el sol
mostró su verdadera cara,
La fue
secando con la realidad,
Y el viento
dejo de soplar en ella,
La fue
marchitando con la soledad,
Perdida su
belleza inicial,
El olvido
se encargo de lo demás,
Sola y
desesperada comenzó a gritar,
Y como si
oyese a las flores, llego él,
La corto
de la planta que la vio nacer,
Le mutilo
las hojas que ya secas estaban,
Acabo con
los pétalos que marchitos sobraban,
La puso en
agua y la adorno,
Le dio un
lugar privilegiado
Entre
otras flores muertas,
Exhibió su
cadáver con los de las demás
Y las
vendió por docena.